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jueves, 20 de noviembre de 2025

VALLE DE CHALCO: ALCALDE DESENCADENA AMENAZAS VELADAS CONTRA SU PROPIO CABILDO, EN UN DISCURSO QUE RAYA EN LA INTIMIDACIÓN POLÍTICA


* La prepotencia y el autoritarismo se apoderan del gobierno local; el edil lanza advertencias y exhibe presuntos favores a delincuentes, mientras la inseguridad domina las calles

 

Por: EXPEDIENTE SECRETO

 



VALLE DE CHALCO, Estado de México, 19 de noviembre de 2025.- Un video difundido en redes sociales exhibe al alcalde morenista Alan Velasco Agüero en un arranque de molestia y con un discurso que raya en la intimidación directa contra los integrantes de su propio cabildo. Textualmente, el edil afirmó: “La gente que vea este cabildo sabe que le hemos pegado muy bien a los puntos de droga”, y posteriormente lanzó una grave acusación al señalar que regidores, regidoras y síndicos han solicitado favores para liberar a personas detenidas por “malas prácticas”, es decir, por robo, posesión de droga o vehículos con reporte de robo.

 

En tono desafiante, el alcalde sentenció: “Si vamos a hablar de seguridad, vamos todos juntos y a donde tope, y si no, entonces tranquilitos y dejen que los tres niveles de gobierno hagan lo propio. Porque si venimos a hacer política y publicidad, en mi gobierno no está permitido”. Su mensaje, cargado de tensión, fue interpretado como una amenaza directa, una advertencia clara para quienes pretendan exhibir las fallas municipales o discrepar con su gestión.

 

Incluso fue más allá al decir: “Si se van a meter, se van a meter por la derecha, pero no me pueden decir que aquí delante de las cámaras me doy golpes de pecho y por atrás, tírame paro” —en alusión a presuntos actos de intervención irregular por parte de regidores para beneficiar a presuntos delincuentes—. La escena, que lo muestra desencajado y visiblemente molesto, deja entrever un ejercicio de poder basado en la presión, la intimidación y el temor.

 

Estas declaraciones abren un debate de fondo: por un lado, exhiben posibles actos de complicidad de representantes públicos en delitos; por otro, revelan que el alcalde estaría utilizando esta información como mecanismo de control político. En otras palabras, Velasco Agüero se comporta como virrey más que como servidor público, lanzando amenazas veladas que vulneran la libertad de expresión y violentan la esencia misma de la colaboración institucional.

 

Cabe recordar que este no es un hecho aislado. Hace unas semanas, el mismo edil lanzó una advertencia a la diputada local morenista Yesica Yanet Rojas Hernández, diciéndole: “Aguas, diputada… México está difícil… todos tenemos un lado flaquito por donde nos pueden llegar”. La frase detonó alarma en redes sociales, al interpretarse como un intento de intimidación hacia una legisladora que ha cuestionado duramente la seguridad en el municipio.

 

El evidente resentimiento de Velasco hacia Rojas se explica por los constantes señalamientos desde el Congreso, donde la diputada ha denunciado el crecimiento de la inseguridad en Valle de Chalco, uno de los municipios peor evaluados en percepción delictiva en el Estado de México. Más aún, la legisladora ha convertido la demanda de seguridad en una bandera legítima, pues su esposo, el ex presidente municipal Francisco Tenorio, fue asesinado el 2 de noviembre de 2019. A más de un año del crimen, los autores intelectuales continúan libres.

 

La ciudadanía ve en Yesica Rojas una voz auténtica, que por primera vez representa sus exigencias de seguridad. Su posicionamiento social la ha fortalecido políticamente y la proyecta como la candidata natural de Morena a la alcaldía. Ese respaldo popular parece tener contra las cuerdas al actual presidente municipal, quien responde con autoritarismo, presión y advertencias.

 

Mientras tanto, los habitantes de Valle de Chalco siguen padeciendo los estragos de la delincuencia, señalando que la policía municipal —en lugar de combatir el crimen— opera como cómplice de los grupos delincuenciales. En este contexto, las palabras del alcalde no solo exhiben fracturas dentro de la administración, sino que evidencian un estilo de gobierno basado en el temor, la imposición y el silenciamiento del disenso.

 

Lo dicho por Alan Velasco Agüero no solo es preocupante: constituye un reflejo peligroso de cómo se ejerce el poder en Valle de Chalco. Cuando desde el propio gobierno se intenta acallar la crítica y frenar la libertad de expresión con amenazas, es la democracia la que se encuentra bajo ataque.

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