MARTHA GUERRERO PRESUME LOGROS ATRASADOS MIENTRAS CRECEN SOSPECHAS DE DESVÍOS MILLONARIOS
* A casi un año de haber tomado protesta, incumple su promesa
de denunciar corrupción pasada y enfrenta señalamientos de encubrirla para
beneficio propio
Por: EXPEDIENTE SECRETO
LOS REYES LA PAZ, Estado de México, 28 de noviembre de 2025.–
Mientras la alcaldesa morenista Martha Guerrero Sánchez intenta vender como
gran logro la compra de cinco camiones cisterna y cuatro compactadoras de
basura, la ciudadanía se pregunta por qué esta acción se realiza hasta casi un
año después de haber asumido el cargo, cuando era una obligación básica desde
el primer día de gobierno.
El retraso no solo evidencia incapacidad de gestión, sino que
abre la puerta a un cuestionamiento mayor: ¿Dónde quedó el presupuesto
millonario de 2025? Porque mientras la mandataria exige aplausos por una
inversión tardía, La Paz enfrenta un evidente deterioro urbano, servicios
públicos en crisis y un creciente malestar social.
A esto se suma un rumor que corre con fuerza entre los
habitantes y actores políticos locales: presuntamente su esposo, Tranquilino
Lagos Buenabad, estaría beneficiándose directamente del manejo del erario,
apropiándose “a carretilladas” de recursos públicos, mientras la alcaldesa
distrae a la población con compras que debieron haberse realizado desde el
inicio de la administración.
Y la incongruencia se hace aún más evidente cuando se analiza
su actuar político: En enero, recién asumido el cargo, Martha Guerrero prometió
públicamente denunciar a la exalcaldesa priísta, Cristina González Cruz, a
quien acusó de millonarios desvíos y aseguró que por lo menos se presentarían
10 denuncias. Hoy, casi un año después, no existe una sola denuncia formal.
Lejos de combatir la corrupción, todo indica que utilizó ese
discurso como estrategia política para justificar futuras irregularidades
financieras dentro de su administración y desviar la atención de posibles
desvíos cometidos por ella misma y su círculo cercano.
Resulta insultante que ahora declare que la compra de unidades
es producto de una supuesta “austeridad” y “finanzas sanas”, cuando según su
propia versión, al llegar al gobierno “no tenían ni para pagar la primera
quincena de sueldos”, pero en menos de un año aseguraron haber recaudado 11
millones de pesos contra los 4 millones de la administración anterior.
Ese aparente “ahorro histórico” contrasta con el estado
lamentable del municipio y, lejos de generar confianza, levanta sospechas de
manipulación financiera y encubrimiento institucional.
La ciudadanía lo dice con claridad: “Martha Guerrero no solo no
cumplió… engañó a su pueblo.”
Y hoy, tras un año de gobierno, no rinde cuentas sobre los
recursos, no ha combatido la corrupción como prometió y, por el contrario,
carga sobre su administración señalamientos de opacidad, omisión y complicidad.
Mientras exige reconocimiento por hacer tarde y a medias lo
que le correspondía, el municipio sigue hundido entre basura, escasez de agua,
abandono y desilusión.










